Cada vez son más los usuarios que se están decantando por cambiar sus antiguos vehículos de combustión por otros eléctricos. Esto es debido a que se reduce significativamente el dióxido de carbono que lanzan a la atmósfera.
A continuación, os contaremos más acerca de este nuevo modelo de transporte y qué se requiere para instalarlo en casa.
1. Vehículos eléctricos
El Consejo de ministros aprobó un anteproyecto de Ley sobre el cambio climático y la transición energética, en la que pretendía acabar con los vehículos ligeros de combustión para el año 2050. En 30 años, todos los automóviles y furgonetas no podrán emitir CO2 y entonces, serán los coches eléctricos los que se moverán por nuestras carreteras.
Si planeas comprar un coche eléctrico, debes tener en cuenta que debes poder cargarlo cerca de tu vivienda o en la misma, los cargadores no siempre se encuentran disponibles o no quedan cerca, por lo que pensar en instalar uno en nuestra casa es una gran idea.
2. Cargar el coche eléctrico
Para cargar nuestro vehículo, podemos hacerlo de diferente formas. En casa, en puntos instalados en supermercados o por la ciudad, aunque no abunden demasiado.
Cargar el vehículo en casa, se conoce como recarga vinculada, en este punto, recargarás el vehículo entorno al 85 y 90 por ciento de las veces. Si vamos a comprar un coche eléctrico, es recomendable instalar un punto de recarga en nuestra vivienda, será la forma más barata de recargarlo, eso sí, si aprovechamos cuando el precio de mercado está más barato.
Existen dos opciones de carga en casa: vivienda particular con una plaza de garaje propia o garaje comunitario.
Para instalar el punto de recarga en nuestra vivienda, debemos seguir la normativa ITC BT-52 donde se exige que se instale un circuito exclusivo que no podrá superar los 9,2 kW de potencia. Una casa común puede oscilar entre los 3,6 kW y los 7,4 kW por lo que no sería en muchos casos necesario ampliar la potencia contratada. Las viviendas unifamiliares pueden conectar el vehículo al enchufe de toda la vida (el que usa una nevera o un microondas). Si no, es aconsejable instalar una base mural de recarga conocida como wallbox, que tendrá un conector adecuado para realizar las recargas con un coche eléctrico.
Por otro lado, en las comunidades de vecinos donde el garaje es comunitario, basta con informar por escrito al presidente de la comunidad o al administrador de fincas.
3. ¿Cuánto cuesta la instalación?
El precio dependerá del tipo y modelo de cargador, la disposición del garaje y lo que tengas que hacer para llevar la corriente hasta el punto de carga. Por eso, fijar un precio es complicado. Así pues, para hacernos una idea, teniendo en cuenta que solo el cargador cuesta entre 400 y 800 euros (o incluso más si apostamos por mayores potencias), para el precio de la instalación total estaríamos hablando de entre 1000 y 1200 euros. Eso, al menos, en lo que respecta a la instalación mínima de 3,6 kW.
Por último…
Si deseas instalar un punto de recarga, te aconsejamos que instales paneles solares, estos reducirán considerablemente el gasto de luz que puedas tener.
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Esperamos que este post sobre los vehículos eléctricos te haya servido de ayuda. No olvides continuar leyendo nuestro blog para seguir al tanto de las novedades de este servicio.